En este artículo se
expone de forma detallada, qué es el plagio y sus diversas formas.
1. ¿Qué constituye
plagio? Guía para trabajos académicos
Según la RAE, plagio
es “copiar en lo sustancial obras ajenas, dándolas como propias”. Plagio es
usar el trabajo, las ideas, o las palabras de otra persona como si fueran
propias, sin dejar constancia explícita de dónde proviene dicha información. No
importa si la fuente es un artículo académico publicado, un estudiante, una
página web sin autoría definida o cualquier otra.
Apropiarse del
trabajo de otro es un robo y no puede aceptarse en ningún caso, independientemente
de si se hace de forma intencionada o no.
Parece obvio que
copiar las palabras de alguien literalmente y entregarlas en un trabajo con el nombre
del estudiante es plagio. Sin embargo, otros tipos de plagio podrían ser menos familiares
al estudiante. Esas formas más sutiles de plagio son realmente las más comunes.
El estudiante debe conocerlas y evitarlas cuando realiza su investigación y
escribir con cuidado y responsabilidad.
2. Tipos de plagio
A continuación se
explican los principales tipos de plagio y se ofrecen sugerencias para evitarlos
cuando se realiza un trabajo académico. En el punto 3 de esta guía se han
recogido ejemplos de ambas cosas: tipo de plagio y formas de evitarlos.
Antes de empezar con
la descripción de los tipos de plagio, es importante señalar que se considera
plagio tanto si la fuente de la que se extrae el texto copiado o parafraseado
de forma inadecuada está en el mismo idioma que el trabajo que se escribe como
si está en otro idioma.
2.1. Plagio literal
Se produce cuando el
estudiante copia un texto o una frase de una fuente y lo usa tal cual en su
trabajo. Para evitarlo, hay dos opciones:
1) Poner entre
comillas la frase o texto copiado literalmente y citar la fuente de la que la
ha extraído.
2) Parafrasear el
texto e indicar la fuente de la que se ha extraído.
2.2. Plagio mosaico
Si el estudiante
copia varias frases o textos de una o más fuentes cambiando sólo unas pocas
palabras, sin
parafrasear adecuadamente y sin citar las fuentes, comete plagio mosaico. Es
importante saber que
el estudiante podría incurrir en este tipo de plagio como resultado de una
toma de notas
descuidada, dando lugar a confusión sobre si las ideas que incluye su trabajo
son propias o de la
fuente usada.
Este plagio se puede
evitar usando las mismas recomendaciones que se han hecho para el
plagio literal.
2.3. Parafraseado
inadecuado
A la hora de
parafrasear no es suficiente con cambiar unas pocas palabras aquí y allí y dejar
el
resto intacto. En
lugar de eso, se debe rehacer completamente la idea de la fuente en palabras
propias. Si el
lenguaje utilizado es muy parecido al original se está cometiendo plagio,
incluso
si se cita la fuente.
Si se desea usar las
palabras del autor, éstas deben ponerse entre comillas y se debe citar la
fuente de la que se
extraen, tal y como se ha explicado para el caso del plagio literal.
2.4. Parafraseado no
citado
Cuando usamos
nuestras propias palabras para describir las ideas de otro, esas ideas siguen
perteneciendo a ese
autor. Por tanto, no es suficiente con parafrasear el texto de forma
responsable, también
debe citarse la fuente de la que se extrae.
2.5. Entrecomillado
no citado
Cuando usamos
material de otros autores y lo entrecomillamos en nuestros trabajos, estamos
dejando claro al
lector que hemos extraído esas ideas de alguna fuente. Pero no es suficiente
con indicar que el
material entrecomillado no es el producto de nuestro propio pensamiento,
hay que dar crédito
al autor proporcionado una cita al documento original.
Fuente:
Guía del TFG GRADO EN
RELACIONES LABORALES Y RECURSOS HUMANOS de la Universidad de Murcia, basada a
su vez en el Manual del alumno2 de la Facultad de Economía y Empresa. Curso 2013-14 (http://hdl.handle.net/10201/37807).
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